PUERTA ABIERTA A LA VIDA

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En medio del frenesí cotidiano la naturaleza se impone con fuerza como un golpe de silencio y perspectiva que nos deja asombrados.

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El escenario que nos presentan Aggy y Thomas nos invita a recogernos, a redescubrir la necesidad básica de sentirnos pequeños, minúsculos, en medio de una creación perfecta. Nos hace sentir una persona más en medio de un mundo de gente. Pero no por corrientes nos desprecia, todo lo contrario, nos enaltece la oportunidad de ser parte de este mundo poderoso que grita fuerte en las tempestades, en el correr de una tropilla, en las corrientes del mar. Ríe también, con sonrisas de todos los colores, en los animales más extravagantes, en los reflejos del sol.

 

Es un mundo fuerte y poderoso, a la vez que se muestra tímido y vulnerable a quien sabe apreciarlo.

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Te invitamos a recorrer esta galería de pequeños tesoros que tan generosamente Aggy y Thomas nos acercan para recordarnos con tan solo mirar, que este mundo increíble está vivo y depende de nosotros saber disfrutarlo. En ese sentido, cada una de sus fotografías son cómo un retrato respetuoso que quiere captar sigilosamente ese asombro, esa gratitud hacia el regalo más mágico.